Hay un faltante de 3 millones de viviendas en los Estados Unidos

Que los precios de las viviendas se han disparado en los Estados Unidos no es novedad para nadie. A nivel país, de comienzos de 2021 a comienzos de 2022, el valor de los inmuebles aumentó un 20% según un análisis de la consultora Freddie Mac.

Según la misma consultora, lo que está disparando los precios es la falta de inventario. Para el número de estadounidenses que están buscando comprar un hogar, faltarían al menos 3 millones más de viviendas en el país.

¿Cuál es el origen de esta falta de inventario? Los expertos creen que tiene que ver con la crisis financiera y de viviendas del 2008, que acarreó problemas que explotaron durante la pandemia. Cuando en 2008 explotó la llamada burbuja inmobiliaria y miles de personas perdieron sus hogares, muchas empresas constructoras terminaron quedando fuera del mercado, en bancarrota.

Esto llevó a muchos trabajadores de la construcción a tener que buscar nuevos rumbos, cambiando de industria. Con el correr de los años, la construcción mejoró pero nunca, antes de la pandemia, se llegó a los niveles de construcción previos a 2008.

Cuando el encierro llevó a muchos a descentralizarse, buscando hogares en ciudades más económicas que ofrecían más espacio (gracias al trabajo remoto), se disparó la venta de hogares y las reparaciones de los hogares. Según Freddie Mac, en 2018 faltaban alrededor de 2 millones de viviendas en los Estados Unidos en base a la demanda. El número llegó ahora -cuatro años después y pandemia de por medio- a las 3 millones de viviendas faltantes.

A esto se suma un fenómeno que se ve en todas las industrias del país: la falta de trabajadores. Las constructoras no consiguen empleados. Pero hay más, las fábricas tampoco tienen suficientes empleados y la producción internacional ha disminuido, por lo que se ve otro fenómeno: faltan materiales.

Conseguir electrodomésticos es una odisea en este momento. Si una persona quiere electrodomésticos específicos de una marca y un color, la demora para la entrega puede ser de hasta un año. Algo nunca antes visto en los Estados Unidos.

“El principal impulsor del déficit de vivienda ha sido la disminución a largo plazo en la construcción de viviendas unifamiliares. Esa disminución se ha visto exacerbada por una disminución aún mayor en la oferta de viviendas unifamiliares de nivel básico o iniciales”, indica el reporte de Freddie Mac.

El otro factor a tener en cuenta es que lo millennials, que son cerca de 72 millones de personas, componen ahora el mayor porcentaje de la población de la nación. Por un tema de edad, este grupo está en el pico de las compras de viviendas por primera vez en sus vidas, aumentando la demanda.

Estadísticamente, las personas compran su primera vivienda entre los 25 y los 29 años de edad. Desde 2016 se ha notado una tendencia de compra de viviendas para aquellos que tienen entre 25 y 34 años, ampliando la demanda.

“La combinación de una oferta baja (especialmente de nivel de entrada) y una demanda alta (particularmente de nivel de entrada) está provocando que los precios de nivel de entrada aumenten rápidamente muy por encima de los precios generales, lo que genera problemas de asequibilidad para que los compradores presenten pagos iniciales aún mayores”, se lee en el reporte.

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